A partir del mes de marzo de 2020 como consecuencia de la propagación mundial del virus SARS-CoV2 se ordenaron una serie de medidas tendientes a disminuir la propagación, disponiendo el aislamiento social, preventivo y obligatorio, el distanciamiento social preventivo y otras tendientes a la abstención de concurrir a sus lugares de trabajo y la prohibición de desplazarse por rutas, vías y espacios públicos, todo ello con el fin de prevenir la circulación del virus mencionado precedentemente, y la consiguiente afectación a la salud pública.