Gustavo Pereyra presentó el informe anual y pidió actualizar la normativa y presupuesto de la Defensoría
El defensor del Pueblo de Neuquén, Gustavo Pereyra, presentó ante el Concejo Deliberante el Informe Anual 2024-2025, donde detalló las intervenciones realizadas entre septiembre de 2024 y agosto de 2025, el trabajo conjunto con organismos provinciales y municipales y los desafíos pendientes en materia presupuestaria y edilicia.
Intervenciones, estadísticas y trabajo con otros organismos
Durante su exposición, Pereyra repasó la tarea diaria de la Defensoría, que incluyó mediación, orientación legal e intervenciones en casos que incluso llegaron a la Justicia sin resolución de fondo. También compartió información estadística sobre la cantidad de reclamos y el tipo de demandas más frecuentes.
El funcionario valoró además el trabajo articulado con entes municipales y provinciales, que —según afirmó— permitió avanzar en soluciones concretas para vecinos y vecinas de la ciudad.
El Neuquén del futuro y la necesidad de reformar la Ordenanza 8316
Uno de los ejes centrales del informe fue la mirada a largo plazo. Pereyra sostuvo que es imprescindible pensar la ciudad hacia 2050 y, para ello, insistió en la necesidad de adecuar la Ordenanza 8316, que regula el funcionamiento de la Defensoría del Pueblo.
Explicó que ciertos artículos de la normativa “necesitan actualización” para ordenar competencias, modernizar procedimientos y adaptar el organismo a las nuevas demandas sociales.
Reclamo por presupuesto y advertencia por el déficit
Otro de los puntos destacados fue lo presupuestario. Pereyra advirtió que los fondos actuales son insuficientes para cubrir los gastos básicos del organismo y señaló que, para evitar iniciar 2026 con déficit, la Defensoría presentó un presupuesto con un incremento del 25%, basado en el ejecutado real y no en el monto aprobado.
“Es una herramienta necesaria para garantizar el funcionamiento y evitar retrasos en la atención”, afirmó.
Situación edilicia: “Trabajamos en condiciones de casi hacinamiento”
El defensor del Pueblo reiteró la necesidad de que el organismo cuente con una casa propia, debido a las condiciones edilicias actuales. “Hoy se trabaja en condiciones de casi hacinamiento”, expresó, y consideró que disponer de un edificio adecuado permitiría mejorar la atención y ampliar la capacidad operativa.
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Reconocimiento al equipo de la Defensoría
Antes de concluir su discurso, Pereyra agradeció el aporte del equipo de la Defensoría, destacando el compromiso en la atención cotidiana: “El trabajo de cada integrante es clave para brindar la mejor atención posible a la ciudadanía”, señaló.
